RV60a
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LBLA
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NVI
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TLA
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1
Jehová
es mi luz y mi salvación
Jehová
es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré?
Jehová
es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?
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1 Salmo
de David. El SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿a quién temeré? El SEÑOR es
la fortaleza de mi vida; ¿de quién tendré temor?
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1
Salmo
27
Salmo de
David.
El SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿a quién
temeré? El SEÑOR es el baluarte de mi vida; ¿quién podrá amedrentarme?
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1 Dios mío,
tú eres mi luz y mi salvación; ¿de quién voy a tener miedo? Tú eres quien
protege mi vida; ¡nadie me infunde temor!
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2 Cuando se juntaron contra mí los malignos,
mis angustiadores y mis enemigos,
Para
comer mis carnes, ellos tropezaron y cayeron.
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2 Cuando para devorar mis carnes vinieron
sobre mí los malhechores, mis adversarios y mis enemigos, ellos tropezaron y
cayeron.
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2 Cuando los
malvados avanzan contra mí para devorar mis carnes, cuando mis enemigos y
adversarios me atacan, son ellos los que tropiezan y caen
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2 Cuando mis
malvados enemigos me atacan y amenazan con destruirme, son ellos los que
tropiezan, son ellos los que caen.
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3 Aunque un ejército acampe contra mí,
No
temerá mi corazón;
Aunque
contra mí se levante guerra,
Yo
estaré confiado.
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3 Aunque un ejército acampe contra mí, no
temerá mi corazón; aunque en mi contra se levante guerra, a pesar de ello, estaré confiado.
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3 Aun cuando
un ejército me asedie, no temerá mi corazón; aun cuando una guerra estalle
contra mí, yo mantendré la confianza.
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3 Me puede
atacar un ejército, pero yo no siento miedo; me pueden hacer la guerra, pero
yo mantengo la calma.
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4 Una cosa he demandado a Jehová, ésta
buscaré;
Que esté
yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida,
Para
contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo.
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4 Una cosa he pedido al SEÑOR, y ésa buscaré: que habite yo en la casa del
SEÑOR todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura del SEÑOR, y
para meditar en su templo.
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4 Una sola
cosa le pido al SEÑOR, y es lo único que persigo: habitar en la casa del
SEÑOR todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura del SEÑOR y
recrearme en su templo
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4 Dios mío,
sólo una cosa te pido, sólo una cosa deseo: déjame vivir en tu templo todos
los días de mi vida, para contemplar tu hermosura y buscarte en oración.
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5 Porque él me esconderá en su tabernáculo en
el día del mal;
Me
ocultará en lo reservado de su morada;
Sobre
una roca me pondrá en alto.
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5 Porque en el día de la angustia me
esconderá en su tabernáculo; en lo secreto de su tienda me ocultará; sobre
una roca me pondrá en alto.
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5 Porque en
el día de la aflicción él me resguardará en su morada; al amparo de su
tabernáculo me protegerá, y me pondrá en alto, sobre una roca
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5 Cuando
vengan tiempos difíciles, tú me darás protección: me esconderás en tu templo,
que es el lugar más seguro.
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6 Luego levantará mi cabeza sobre mis
enemigos que me rodean,
Y yo
sacrificaré en su tabernáculo sacrificios de júbilo;
Cantaré
y entonaré alabanzas a Jehová.
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6 Entonces será levantada mi cabeza sobre mis
enemigos que me cercan; y en su tienda ofreceré sacrificios con voces de
júbilo; cantaré, sí, cantaré alabanzas al SEÑOR.
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6 Me hará
prevalecer frente a los enemigos que me rodean; en su templo ofreceré
sacrificios de alabanza y cantaré salmos al SEÑOR.
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6 Tú me darás
la victoria sobre mis enemigos; yo, por mi parte, cantaré himnos en tu honor,
y ofreceré en tu templo sacrificios de gratitud.
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7 Oye, oh Jehová, mi voz con que a ti clamo;
Ten
misericordia de mí, y respóndeme.
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7 Escucha, oh SEÑOR, mi voz cuando clamo; ten
piedad de mí, y respóndeme.
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7 Oye, SEÑOR,
mi voz cuando a ti clamo; compadécete de mí y respóndeme
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7 Dios mío,
te estoy llamando: ¡escúchame! Ten compasión de mí: ¡respóndeme!
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8 Mi corazón ha dicho de ti: Buscad mi
rostro.
Tu
rostro buscaré, oh Jehová;
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8 Cuando dijiste:
Buscad mi rostro, mi corazón te respondió: Tu rostro, SEÑOR, buscaré.
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8 El corazón
me dice: «¡Busca su rostro!»[a]
Y yo, SEÑOR, tu rostro busco
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8 Una voz
interna me dice: «¡Busca a Dios!» Por eso te busco, Dios mío.
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9 No escondas tu rostro de mí.
No
apartes con ira a tu siervo;
Mi ayuda
has sido.
No me
dejes ni me desampares, Dios de mi salvación.
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9 No escondas tu rostro de mí; no rechaces
con ira a tu siervo; tú has sido mi ayuda. No me abandones ni me desampares,
oh Dios de mi salvación.
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9 No te
escondas de mí; no rechaces, en tu enojo, a este siervo tuyo, porque tú has
sido mi ayuda. No me desampares ni me abandones, Dios de mi salvación.
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9 Yo estoy a
tu servicio. No te escondas de mí. No me rechaces. ¡Tú eres mi ayuda! Dios
mío, no me dejes solo; no me abandones; ¡tú eres mi salvador!
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10 Aunque mi padre y mi madre me dejaran,
Con
todo, Jehová me recogerá.
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10 Porque aunque
mi padre y mi madre me hayan abandonado, el SEÑOR me recogerá.
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10
Aunque mi padre y mi madre me abandonen, el SEÑOR me recibirá en sus brazos.
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10 Mis
padres podrán abandonarme, pero tú me adoptarás como hijo.
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11 Enséñame, oh Jehová, tu camino,
Y guíame
por senda de rectitud
A causa
de mis enemigos.
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11 SEÑOR, enséñame tu camino, y guíame por
senda llana por causa de mis enemigos.
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11
Guíame, SEÑOR, por tu camino; dirígeme por la senda de rectitud, por causa de
los que me acechan
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11 Dios
mío, por causa de mis enemigos dime cómo quieres que viva y llévame por el
buen camino.
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12 No me entregues a la voluntad de mis
enemigos;
Porque
se han levantado contra mí testigos falsos, y los que respiran crueldad.
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12 No me entregues a la voluntad de mis
adversarios; porque testigos falsos se han levantado contra mí, y los que
respiran violencia.
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12 No me
entregues al capricho de mis adversarios, pues contra mí se levantan falsos
testigos que respiran violencia.
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12 No
dejes que mis enemigos hagan conmigo lo que quieran. Falsos testigos se
levantan, me acusan y me amenazan.
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13 Hubiera yo desmayado, si no creyese que
veré la bondad de Jehová
En la
tierra de los vivientes.
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13 Hubiera yo
desmayado, si no hubiera creído que había de ver la bondad del
SEÑOR en la tierra de los vivientes.
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13 Pero
de una cosa estoy seguro: he de ver la bondad del SEÑOR en esta tierra de los
vivientes.
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13 ¡Pero
yo sé que viviré para disfrutar de tu bondad junto con todo tu pueblo!
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14 Aguarda a Jehová;
Esfuérzate, y aliéntese tu corazón;
Sí,
espera a Jehová.
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14 Espera al SEÑOR; esfuérzate y aliéntese tu
corazón. Sí, espera al SEÑOR.
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14 Pon
tu esperanza en el SEÑOR; ten valor, cobra ánimo; ¡pon tu esperanza en el
SEÑOR!
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14 Por
eso me armo de valor, y me digo a mí mismo: «Pon tu confianza en Dios. ¡Sí,
pon tu confianza en él!»
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