Salmos 22:1-31



RV60a
LBLA
NVI
TLA
1

Un grito de angustia y un canto de alabanza
  Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?(A)
 ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación, y de las palabras de mi clamor?
1  Para el director del coro; sobre ajelet-hasahar. Salmo de David. Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación y de las palabras de mi clamor?
1
Salmo 22

Al director musical. Sígase la tonada de «La cierva de la aurora». Salmo de David.
Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? Lejos estás para salvarme, lejos de mis palabras de lamento
1 Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? ¡Tan lejos te mantienes que no vienes en mi ayuda ni escuchas mis gritos de dolor!
2  Dios mío, clamo de día, y no respondes;
 Y de noche, y no hay para mí reposo.
2  Dios mío, de día clamo y no respondes; y de noche, pero no hay para mí reposo.
2 Dios mío, clamo de día y no me respondes; clamo de noche y no hallo reposo.
2 Dios mío, te llamo de día, y no me escuchas; te llamo de noche, y no me respondes.
3  Pero tú eres santo,
 Tú que habitas entre las alabanzas de Israel.
3  Sin embargo, tú eres santo, que habitas entre las alabanzas de Israel.
3 Pero tú eres santo, tú eres rey, ¡tú eres la alabanza de Israel!
3 Entre los dioses tú eres único, tú eres rey, tú mereces que Israel te alabe.
4  En ti esperaron nuestros padres;
 Esperaron, y tú los libraste.
4  En ti confiaron nuestros padres; confiaron, y tú los libraste.
4 En ti confiaron nuestros padres; confiaron, y tú los libraste;
4 Nuestros padres confiaron en ti; en ti confiaron, y tú los libraste;
5  Clamaron a ti, y fueron librados;
 Confiaron en ti, y no fueron avergonzados.
5  A ti clamaron, y fueron librados; en ti confiaron, y no fueron decepcionados.
5 a ti clamaron, y tú los salvaste; se apoyaron en ti, y no los defraudaste.
5 te pidieron ayuda, y los salvaste; en ti confiaron, y no les fallaste.
6  Mas yo soy gusano, y no hombre;
 Oprobio de los hombres, y despreciado del pueblo.
6  Pero yo soy gusano, y no hombre; oprobio de los hombres, y despreciado del pueblo.
6 Pero yo, gusano soy y no hombre; la gente se burla de mí, el pueblo me desprecia
6 En cambio yo, más que hombre parezco un gusano. Soy la burla de hombres y mujeres; todo el mundo me desprecia.
7  Todos los que me ven me escarnecen;
 Estiran la boca, menean la cabeza,(B) diciendo:
7  Todos los que me ven, de mí se burlan; hacen muecas con los labios, menean la cabeza, diciendo:
7 Cuantos me ven, se ríen de mí; lanzan insultos, meneando la cabeza:
7 Todos los que me ven, se ríen de mí, y en son de burla tuercen la boca y mueven la cabeza.
8  Se encomendó a Jehová; líbrele él;
 Sálvele, puesto que en él se complacía.(C)
8  Que se encomiende al SEÑOR; que El lo libre, que El lo rescate, puesto que en El se deleita.
8 «Éste confía en el SEÑOR, ¡pues que el SEÑOR lo ponga a salvo! Ya que en él se deleita, ¡que sea él quien lo libre!»
8 Hasta dicen: «Ya que este confió en Dios, ¡que venga Dios a salvarlo! Ya que Dios tanto lo quiere, ¡que venga él mismo a librarlo!»
9  Pero tú eres el que me sacó del vientre;
 El que me hizo estar confiado desde que estaba a los pechos de mi madre.
9  Porque tú me sacaste del seno materno;  me hiciste confiar desde los pechos de mi madre.
9 Pero tú me sacaste del vientre materno; me hiciste reposar confiado en el regazo de mi madre
9 Pero digan lo que digan, fuiste tú quien me hizo nacer; fuiste tú quien me hizo descansar en los brazos de mi madre.
10  Sobre ti fui echado desde antes de nacer;
 Desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios.
10  A ti fui entregado desde mi nacimiento; desde el vientre de mi madre tú eres mi Dios.
10 Fui puesto a tu cuidado desde antes de nacer; desde el vientre de mi madre mi Dios eres tú
10 Todavía no había nacido yo, cuando tú ya me cuidabas. Aún estaba yo dentro de mi madre, cuando tú ya eras mi Dios.
11  No te alejes de mí, porque la angustia está cerca;
 Porque no hay quien ayude.
11  No estés lejos de mí, porque la angustia está cerca, pues no hay quien ayude.
11 No te alejes de mí, porque la angustia está cerca y no hay nadie que me ayude.
11 ¡No me dejes solo! ¡Me encuentro muy angustiado, y nadie me brinda su ayuda!
12  Me han rodeado muchos toros;
 Fuertes toros de Basán me han cercado.
12  Muchos toros me han rodeado; toros fuertes de Basán me han cercado.
12 Muchos toros me rodean; fuertes toros de Basán me cercan
12 Me rodean mis enemigos, parecen toros bravos de Basán.
13  Abrieron sobre mí su boca
 Como león rapaz y rugiente.
13  Avidos abren su boca contra mí, como un león rapaz y rugiente.
13 Contra mí abren sus fauces leones que rugen y desgarran a su presa
13 Parecen leones feroces, que se lanzan contra mí con ganas de despedazarme.
14  He sido derramado como aguas,
 Y todos mis huesos se descoyuntaron;
 Mi corazón fue como cera,
 Derritiéndose en medio de mis entrañas.
14  Soy derramado como agua, y todos mis huesos están descoyuntados; mi corazón es como cera; se derrite en medio de mis entrañas.
14 Como agua he sido derramado; dislocados están todos mis huesos. Mi corazón se ha vuelto como cera, y se derrite en mis entrañas
14 Me he quedado sin fuerzas, ¡estoy totalmente deshecho! ¡Mi corazón ha quedado como cera derretida!
15  Como un tiesto se secó mi vigor,
 Y mi lengua se pegó a mi paladar,
 Y me has puesto en el polvo de la muerte.
15  Como un tiesto se ha secado mi vigor, y la lengua se me pega al paladar, y me has puesto en el polvo de la muerte.
15 Se ha secado mi vigor como una teja; la lengua se me pega al paladar. ¡Me has hundido en el polvo de la muerte!
15 Tengo reseca la garganta, y pegada la lengua al paladar; me dejaste tirado en el suelo, como si ya estuviera muerto.
16  Porque perros me han rodeado;
 Me ha cercado cuadrilla de malignos;
 Horadaron mis manos y mis pies.
16  Porque perros me han rodeado; me ha cercado cuadrilla de malhechores; me horadaron las manos y los pies.
16 Como perros de presa, me han rodeado; me ha cercado una banda de malvados; me han traspasado[a] las manos y los pies.
16 Una banda de malvados, que parece manada de perros, me rodea por todos lados y me desgarra pies y manos,
17  Contar puedo todos mis huesos;
 Entre tanto, ellos me miran y me observan.
17  Puedo contar todos mis huesos. Ellos me miran, me observan;
17 Puedo contar todos mis huesos; con satisfacción perversa la gente se detiene a mirarme
17 ¡hasta puedo verme los huesos! Mis enemigos me vigilan sin cesar,
18  Repartieron entre sí mis vestidos,
 Y sobre mi ropa echaron suertes.(D)
18  reparten mis vestidos entre sí, y sobre mi ropa echan suertes.
18 Se reparten entre ellos mis vestidos y sobre mi ropa echan suertes.
18 hicieron un sorteo para ver quién se queda con mi ropa.
19  Mas tú, Jehová, no te alejes;
 Fortaleza mía, apresúrate a socorrerme.
19  Pero tú, oh SEÑOR, no estés lejos; fuerza mía, apresúrate a socorrerme.
19 Pero tú, SEÑOR, no te alejes; fuerza mía, ven pronto en mi auxilio
19 Dios mío, tú eres mi apoyo, ¡no me dejes! ¡Ven pronto en mi ayuda!
20  Libra de la espada mi alma,
 Del poder del perro mi vida.
20  Libra mi alma de la espada, mi única vida de las garras del perro.
20 Libra mi vida de la espada, mi preciosa vida del poder de esos perros
20 ¡Respóndeme, sálvame la vida! ¡No dejes que me maten! ¡No dejes que me despedacen! Mis enemigos parecen perros, parecen toros que quieren atacarme, parecen leones que quieren devorarme.
21  Sálvame de la boca del león,
 Y líbrame de los cuernos de los búfalos.
21  Sálvame de la boca del león y de los cuernos de los búfalos; respóndeme.
21 Rescátame de la boca de los leones; sálvame de[b] los cuernos de los toros.

22  Anunciaré tu nombre a mis hermanos;
 En medio de la congregación te alabaré.(E)
22  Hablaré de tu nombre a mis hermanos; en medio de la congregación te alabaré.
22 Proclamaré tu nombre a mis hermanos; en medio de la congregación te alabaré
22 Cuando mi pueblo se junte para adorarte en el templo, yo les hablaré de ti, y te cantaré alabanzas.
23  Los que teméis a Jehová, alabadle;
 Glorificadle, descendencia toda de Jacob,
 Y temedle vosotros, descendencia toda de Israel.
23  Los que teméis al SEÑOR, alabadle; descendencia toda de Jacob, glorificadle, temedle, descendencia toda de Israel.
23 ¡Alaben al SEÑOR los que le temen! ¡Hónrenlo, descendientes de Jacob! ¡Venérenlo, descendientes de Israel!
23 Ustedes, pueblo de Israel, que saben honrar a Dios, ¡reconozcan su poder y adórenlo!
24  Porque no menospreció ni abominó la aflicción del afligido,
 Ni de él escondió su rostro;
 Sino que cuando clamó a él, le oyó.
24  Porque El no ha despreciado ni aborrecido la aflicción del angustiado, ni le ha escondido su rostro; sino que cuando clamó al SEÑOR, lo escuchó.
24 Porque él no desprecia ni tiene en poco el sufrimiento del pobre; no esconde de él su rostro, sino que lo escucha cuando a él clama.
24 Dios recibe a los pobres con los brazos abiertos. Dios no les vuelve la espalda, sino que atiende sus ruegos.
25  De ti será mi alabanza en la gran congregación;
 Mis votos pagaré delante de los que le temen.
25  De ti viene mi alabanza en la gran congregación; mis votos cumpliré delante de los que le temen.
25 Tú inspiras mi alabanza en la gran asamblea; ante los que te temen cumpliré mis promesas
25 Dios mío, sólo a ti te alabaré; te cumpliré mis promesas cuando el pueblo que te honra se reúna para alabarte.
26  Comerán los humildes, y serán saciados;
 Alabarán a Jehová los que le buscan;
 Vivirá vuestro corazón para siempre.
26  Los pobres comerán y se saciarán; los que buscan al SEÑOR, le alabarán. ¡Viva vuestro corazón para siempre!
26 Comerán los pobres y se saciarán; alabarán al SEÑOR quienes lo buscan; ¡que su corazón viva para siempre!
26 Los pobres comerán y quedarán satisfechos; los que te buscan, Dios mío, te cantarán alabanzas. ¡Dales larga vida!
27  Se acordarán, y se volverán a Jehová todos los confines de la tierra,
 Y todas las familias de las naciones adorarán delante de ti.
27  Todos los términos de la tierra se acordarán y se volverán al SEÑOR, y todas las familias de las naciones adorarán delante de ti.
27 Se acordarán del SEÑOR y se volverán a él todos los confines de la tierra; ante él se postrarán todas las familias de las naciones,
27 Dios mío, desde países lejanos, todas las tribus y naciones se acordarán de ti y vendrán a adorarte.
28  Porque de Jehová es el reino,
 Y él regirá las naciones.
28  Porque del SEÑOR es el reino, y El gobierna las naciones.
28 porque del SEÑOR es el reino; él gobierna sobre las naciones.
28 Tú eres rey y gobiernas a todas las naciones.
29  Comerán y adorarán todos los poderosos de la tierra;
 Se postrarán delante de él todos los que descienden al polvo,
 Aun el que no puede conservar la vida a su propia alma.
29  Todos los grandes de la tierra comerán y adorarán; se postrarán ante El todos los que descienden al polvo, aun aquel que no puede conservar viva su alma.
29 Festejarán y adorarán todos los ricos de la tierra; ante él se postrarán todos los que bajan al polvo, los que no pueden conservar su vida
29 Nadie es dueño de su vida. Por eso los que habitan este mundo, y los que están a punto de morir se inclinarán ante ti, y harán fiestas en tu honor.
30  La posteridad le servirá;
 Esto será contado de Jehová hasta la postrera generación.
30  La posteridad le servirá; esto se dirá del Señor hasta la generación venidera.
30 La posteridad le servirá; del Señor se hablará a las generaciones futuras
30 Mis hijos te rendirán culto; las generaciones futuras te alabarán,
31  Vendrán, y anunciarán su justicia;
 A pueblo no nacido aún, anunciarán que él hizo esto.
31  Vendrán y anunciarán su justicia; a un pueblo por nacer, anunciarán que El ha hecho esto.
31 A un pueblo que aún no ha nacido se le dirá que Dios hizo justicia.

31 y los que nacerán después sabrán que tú eres justo y que haces grandes maravillas.