Romanos 2:1-29

RV60a
LBLA
NVI
TLA
1

El justo juicio de Dios
  Por lo cual eres inexcusable, oh hombre, quienquiera que seas tú que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo;(A) porque tú que juzgas haces lo mismo.
1  Por lo cual no tienes excusa, oh hombre, quienquiera que seas tú que juzgas, pues al juzgar a otro, a ti mismo te condenas, porque tú que juzgas practicas las mismas cosas.
1
El justo juicio de Dios
Por tanto, no tienes excusa tú, quienquiera que seas, cuando juzgas a los demás, pues al juzgar a otros te condenas a ti mismo, ya que practicas las mismas cosas.
1 Cuando alguno de ustedes acusa a otro de hacer algo malo, se acusa a sí mismo, porque también hace lo mismo. Así que no tiene ninguna razón de acusar y juzgar a otro,
2  Mas sabemos que el juicio de Dios contra los que practican tales cosas es según verdad.
2  Y sabemos que el juicio de Dios justamente cae sobre los que practican tales cosas.
2 Ahora bien, sabemos que el juicio de Dios contra los que practican tales cosas se basa en la verdad.
2 aunque todos sabemos que, cuando Dios juzga a quienes hacen lo malo, los juzga correctamente.
3  ¿Y piensas esto, oh hombre, tú que juzgas a los que tal hacen, y haces lo mismo, que tú escaparás del juicio de Dios?
3  ¿Y piensas esto, oh hombre, tú que condenas a los que practican tales cosas y haces lo mismo, que escaparás al juicio de Dios?
3 ¿Piensas entonces que vas a escapar del juicio de Dios, tú que juzgas a otros y sin embargo haces lo mismo que ellos?
3 Si ustedes acusan y juzgan a los demás, pero hacen lo mismo que ellos, están muy equivocados si creen que Dios no los va a castigar.
4  ¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento?
4  ¿O tienes en poco las riquezas de su bondad, tolerancia y paciencia, ignorando que la bondad de Dios te guía al arrepentimiento?
4 ¿No ves que desprecias las riquezas de la bondad de Dios, de su tolerancia y de su paciencia, al no reconocer que su bondad quiere llevarte al arrepentimiento?
4 Dios es muy bueno, y tiene mucha paciencia, y soporta todo lo malo que ustedes hacen. Pero no vayan a pensar que lo que hacen no tiene importancia. Dios los trata con bondad, para que se arrepientan de su maldad.
5  Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios,
5  Mas por causa de tu terquedad y de tu corazón no arrepentido, estás acumulando ira para ti en el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios,
5 Pero por tu obstinación y por tu corazón empedernido sigues acumulando castigo contra ti mismo para el día de la ira, cuando Dios revelará su justo juicio.
5 Pero si insisten en desobedecerlo, y no se arrepienten, harán que Dios les aumente el castigo. Llegará el día del juicio final, cuando Dios juzgará a todos, y muy enojado, los castigará a ustedes.
6  el cual pagará a cada uno conforme a sus obras:(B)
6  el cual PAGARA A CADA UNO CONFORME A SUS OBRAS:
6 Porque Dios «pagará a cada uno según lo que merezcan sus obras».[a]
6 Porque Dios le dará a cada uno lo que se merece:
7  vida eterna a los que, perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad,
7  a los que por la perseverancia en hacer el bien buscan gloria, honor e inmortalidad: vida eterna;
7 Él dará vida eterna a los que, perseverando en las buenas obras, buscan gloria, honor e inmortalidad.
7 a los que hicieron lo bueno, con la esperanza de recibir de parte de Dios reconocimiento, honor y vida eterna, Dios los dejará vivir para siempre con él.
8  pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia;
8  pero a los que son ambiciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia: ira e indignación.
8 Pero los que por egoísmo rechazan la verdad para aferrarse a la maldad, recibirán el gran castigo de Dios.
8 Pero a los egoístas y malvados, y que no quieren hacer lo bueno, los castigará con todo su enojo.
9  tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, el judío primeramente y también el griego,
9  Habrá tribulación y angustia para toda alma humana que hace lo malo, del judío primeramente y también del griego;
9 Habrá sufrimiento y angustia para todos los que hacen el mal, los judíos primeramente, y también los gentiles;
9 Todos los malvados serán castigados con dolor y sufrimiento; en primer lugar, los judíos, pero también los que no son judíos.
10  pero gloria y honra y paz a todo el que hace lo bueno, al judío primeramente y también al griego;
10  pero gloria y honor y paz para todo el que hace lo bueno, al judío primeramente, y también al griego.
10 pero gloria, honor y paz para todos los que hacen el bien, los judíos primeramente, y también los gentiles.
10 A los que hayan hecho el bien, Dios les dará un lugar muy especial, y también honor y paz; en primer lugar, a los judíos, pero también a los que no son judíos.
11  porque no hay acepción de personas para con Dios.(C)
11  Porque en Dios no hay acepción de personas.
11 Porque con Dios no hay favoritismos.
11 ¡Dios no tiene favoritos!
12  Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también perecerán; y todos los que bajo la ley han pecado, por la ley serán juzgados;
12  Pues todos los que han pecado sin la ley, sin la ley también perecerán; y todos los que han pecado bajo la ley, por la ley serán juzgados;
12 Todos los que han pecado sin conocer la ley, también perecerán sin la ley; y todos los que han pecado conociendo la ley, por la ley serán juzgados.
12 Dios acepta a los que obedecen la ley de Moisés, pero rechaza a quienes solamente la escuchan y no la obedecen. Los que conocen la ley serán juzgados de acuerdo con esa misma ley. Los que no la conocen, y pecan, serán castigados aunque no conozcan esa ley.
13  porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los hacedores de la ley serán justificados.
13  porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los que cumplen la ley, ésos serán justificados.
13 Porque Dios no considera justos a los que oyen la ley sino a los que la cumplen.

14  Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley, éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos,
14  Porque cuando los gentiles, que no tienen la ley, cumplen por instinto los dictados de la ley, ellos, no teniendo la ley, son una ley para sí mismos,
14 De hecho, cuando los gentiles, que no tienen la ley, cumplen por naturaleza lo que la ley exige,[b] ellos son ley para sí mismos, aunque no tengan la ley.
14 Porque los que no son judíos obedecen los mandatos de la ley de Dios, aunque no la conozcan, pues ellos mismos saben qué es lo bueno y qué es lo malo.
15  mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos,
15  ya que muestran la obra de la ley escrita en sus corazones, su conciencia dando testimonio, y sus pensamientos acusándolos unas veces y otras defendiéndolos,
15 Éstos muestran que llevan escrito en el corazón lo que la ley exige, como lo atestigua su conciencia, pues sus propios pensamientos algunas veces los acusan y otras veces los excusan.
15 Es como si tuvieran la ley escrita en su mente. Su conducta así lo demuestra, pues cuando piensan en algo, ya saben si eso está bien o mal. La buena noticia que yo anuncio enseña que Dios juzgará a toda la humanidad por medio de Cristo Jesús. En ese día, Dios juzgará hasta los pensamientos más secretos.
16  en el día en que Dios juzgará por Jesucristo los secretos de los hombres, conforme a mi evangelio.

Los judíos y la ley

16  en el día en que, según mi evangelio, Dios juzgará los secretos de los hombres mediante Cristo Jesús.
16 Así sucederá el día en que, por medio de Jesucristo, Dios juzgará los secretos de toda persona, como lo declara mi evangelio.

17  He aquí, tú tienes el sobrenombre de judío, y te apoyas en la ley, y te glorías en Dios,
17  Pero si tú, que llevas el nombre de judío y te apoyas en la ley; que te glorías en Dios,
17
Los judíos y la ley
Ahora bien, tú que llevas el nombre de judío; que dependes de la ley y te jactas de tu relación con Dios;
17 Algunos de ustedes dicen con orgullo que son judíos. Se sienten muy seguros porque tienen la ley de Moisés y están orgullosos de su Dios.
18  y conoces su voluntad, e instruido por la ley apruebas lo mejor,
18  y conoces su voluntad; que apruebas las cosas que son esenciales, siendo instruido por la ley,
18 que conoces su voluntad y sabes discernir lo que es mejor porque eres instruido por la ley;
18 Creen saber lo que Dios quiere y, cuando estudian la Biblia, aprenden a conocer qué es lo mejor.
19  y confías en que eres guía de los ciegos, luz de los que están en tinieblas,
19  y te confías en que eres guía de los ciegos, luz de los que están en tinieblas,
19 que estás convencido de ser guía de los ciegos y luz de los que están en la oscuridad,
19 Se sienten muy seguros al decirles a los pecadores lo que deben hacer para ser salvos.
20  instructor de los indoctos, maestro de niños, que tienes en la ley la forma de la ciencia y de la verdad.
20  instructor de los necios, maestro de los faltos de madurez; que tienes en la ley la expresión misma del conocimiento y de la verdad;
20 instructor de los ignorantes, maestro de los sencillos, pues tienes en la ley la esencia misma del conocimiento y de la verdad;
20 Y como tienen la Biblia en la mano, se creen maestros de los ignorantes y de los inexpertos, dueños de la verdad y del conocimiento.
21  Tú, pues, que enseñas a otro, ¿no te enseñas a ti mismo? Tú que predicas que no se ha de hurtar, ¿hurtas?
21  tú, pues, que enseñas a otro, ¿no te enseñas a ti mismo? Tú que predicas que no se debe robar, ¿robas?
21 en fin, tú que enseñas a otros, ¿no te enseñas a ti mismo? Tú que predicas contra el robo, ¿robas?
21 Pero, ¿cómo pueden enseñar a otros, si ustedes mismos no aprenden primero? ¿Cómo pueden enseñar que no se debe robar, si ustedes mismos roban?
22  Tú que dices que no se ha de adulterar, ¿adulteras? Tú que abominas de los ídolos, ¿cometes sacrilegio?
22  Tú que dices que no se debe cometer adulterio, ¿adulteras? Tú que abominas a los ídolos, ¿saqueas templos?
22 Tú que dices que no se debe cometer adulterio, ¿adulteras? Tú que aborreces a los ídolos, ¿robas de sus templos?
22 Dicen que todos deben ser fieles en el matrimonio, pero ustedes mismos son infieles. Odian a los ídolos, pero roban en los templos de esos ídolos.
23  Tú que te jactas de la ley, ¿con infracción de la ley deshonras a Dios?
23  Tú que te jactas de la ley, ¿violando la ley deshonras a Dios?
23 Tú que te jactas de la ley, ¿deshonras a Dios quebrantando la ley?
23 Están orgullosos de tener la Biblia, pero no la obedecen, y son una vergüenza para Dios.
24  Porque como está escrito, el nombre de Dios es blasfemado entre los gentiles por causa de vosotros.(D)
24  Porque EL NOMBRE DE DIOS ES BLASFEMADO ENTRE LOS GENTILES POR CAUSA DE VOSOTROS, tal como está escrito.
24 Así está escrito: «Por causa de ustedes se blasfema el nombre de Dios entre los gentiles.»[c]
24 Tiene razón la Biblia cuando dice: «La gente de otros países habla mal de Dios, por culpa de ustedes mismos.»
25  Pues en verdad la circuncisión aprovecha, si guardas la ley; pero si eres transgresor de la ley, tu circuncisión viene a ser incircuncisión.
25  Pues ciertamente la circuncisión es de valor si tú practicas la ley, pero si eres transgresor de la ley, tu circuncisión se ha vuelto incircuncisión.
25 La circuncisión tiene valor si observas la ley; pero si la quebrantas, vienes a ser como un incircunciso.
25 De nada sirve que alguien se circuncide, si no obedece la ley. Si la desobedece, es como si nunca se hubiera circuncidado.
26  Si, pues, el incircunciso guardare las ordenanzas de la ley, ¿no será tenida su incircuncisión como circuncisión?
26  Por tanto, si el incircunciso cumple los requisitos de la ley, ¿no se considerará su incircuncisión como circuncisión?
26 Por lo tanto, si los gentiles cumplen[d] los requisitos de la ley, ¿no se les considerará como si estuvieran circuncidados?
26 En cambio, los que no están circuncidados, pero obedecen la ley, son aceptados por Dios, aunque no estén circuncidados.
27  Y el que físicamente es incircunciso, pero guarda perfectamente la ley, te condenará a ti, que con la letra de la ley y con la circuncisión eres transgresor de la ley.
27  Y si el que es físicamente incircunciso guarda la ley, ¿no te juzgará a ti, que aunque tienes la letra de la ley y eres circuncidado, eres transgresor de la ley?
27 El que no está físicamente circuncidado, pero obedece la ley, te condenará a ti que, a pesar de tener el mandamiento escrito[e] y la circuncisión, quebrantas la ley.
27 Así que los que obedecen la ley los juzgarán a ustedes, aun cuando ellos nunca hayan sido circuncidados. Porque ustedes, aunque se circuncidaron y tuvieron la ley, nunca la obedecieron.
28  Pues no es judío el que lo es exteriormente, ni es la circuncisión la que se hace exteriormente en la carne;
28  Porque no es judío el que lo es exteriormente, ni la circuncisión es la externa, en la carne;
28 Lo exterior no hace a nadie judío, ni consiste la circuncisión en una señal en el cuerpo.
28 No crean que ustedes son judíos sólo porque viven como judíos y porque están circuncidados.
29  sino que es judío el que lo es en lo interior, y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en letra; la alabanza del cual no viene de los hombres, sino de Dios.
29  sino que es judío el que lo es interiormente, y la circuncisión es la del corazón, por el Espíritu, no por la letra; la alabanza del cual no procede de los hombres, sino de Dios.
29 El verdadero judío lo es interiormente; y la circuncisión es la del corazón, la que realiza el Espíritu, no el mandamiento escrito. Al que es judío así, lo alaba Dios y no la gente.

29 Los verdaderos judíos son los que obedecen a Dios, y no a las leyes humanas. A judíos así, Dios los acepta, aunque la gente los rechace.